¿La nueva realidad realmente existe?

 


Esta pregunta surge del cuestionamiento sobre lo que sucede actualmente en el contexto, para responderla recapitulemos;  

A finales del año 2019 en la ciudad de Wuhan en China se origina el brote de un virus que nadie esperaba se expandiera de la forma como ocurrió, para marzo del 2020 llega a Colombia y así ya se había desencadenado una pandemia con la que nadie contaba, desde la peste negra en la edad media por el año 1346 que no llego a Colombia porque aun los virus no conocían estas tierras o la gripa española en 1918 que llego a Colombia y afecto la capital Bogotana dada la poca eficiencia estatal para manejar la situación, (según lo citan escritos que analizan la situación) y como consecuencia se crea una infraestructura hospitalaria y se desarrollan y construyen viviendas modernas mejor distribuidas para evitar el hacinamiento, con servicios de alcantarillado y aseo, porque salió a flote la miseria en la cual vivía la mayoría de la población en Bogotá, entonces la gripa española no solo llego a Colombia, sino que afecto muchos lugares del mundo en el contexto de la primera guerra mundial, así entre la primera guerra mundial, la pandemia, y los conflictos políticos internos del pais entre liberales y conservadores, no se sabia que era peor.



En 1900 Bogotá contaba con 96.000 habitantes aproximadamente y para 1918 ya tenía 125.000



Conocer antecedentes es importante, porque una vez se conocen uno dice; pues no es nada nuevo lo que esta pasando, ¡Que vaina!.  Asi, para lo que se vive hoy en el segundo semestre del 2021 y desde el 2020, en la capital Bogotana no era la primera vez que las calles quedaban vacías, no era la primera vez que se cerraron restaurantes, tiendas, almacenes y bares que para el contexto de 1918 se llamaban chicherías, no era la primera vez que colapsaban los servicios y se cerraba todo el comercio, no era la primera vez que la gente sufría de ansiedad respecto a una enfermedad que podía devastar familias enteras, no era la primera vez que todos los ciudadanos tenían que encerrarse y solo y tan solo salir si era prioritario, entonces los mas afectados fueron personas que tenían como trabajo atender o relacionarse con otros, así la trasmisión de la gripa española no se hizo esperar en policías, soldados, médicos, enfermeras, conductores y operarios del transporte urbano que para la época no era Transmilenio, sino el tren y el tranvía, los maestros y sus alumnos, y en si todo empleado que debiera movilizarse o atender personas fue contagiado, incluso los sacerdotes fueron contagiados por sus fieles, quienes recurrían a la ayuda divina.


Por si fuera poco, en Colombia no solo se enfrento la gripa española y sus estragos, sino que al tiempo se estaba lidiando con la viruela y hasta la tuberculosis, enfermedades mortales, así para la época se creo una junta de higiene, que no pudo hacer mucho, por falta de cuidado, atención, aplicación y diligencia. En Bogotá ya se registraban mas de 900 muertes, y la enfermedad comenzó a llegar a los municipios del altiplano cundiboyacense llegando a Tunja afectando en su mayoría a la población joven, además como consecuencia de la guerra la economía se vio afectada y el gobierno de Marco Fidel Suarez tuvo que resolver los estragos de la enfermedad y las consecuencias de la primera guerra mundial que llegaron al territorio, donde la población mas afectada fueron los artesanos y obreros, es decir la base de la pirámide, las clases bajas, Como se vive ahora con el coronavirus.



Y Como se vive ahora con el coronavirus, con la gripa española se vivieron rebrotes y picos, y como sucede ahora con el coronavirus, con la gripa española salieron a flote cantidad de problemáticas sociales, políticas y económicas, tales como; la miseria que vivía la población, la corrupción del gobierno, la falta de estructura hospitalaria, la falta de garantías y servicios para la clase trabajadora mas pobre que era la mitad de la población en Bogotá, y pues como sucede ahora en medio del coronavirus, en aquel entonces la población clamaba por reformas en la prestación de los servicios de salud, en el trabajo, el la vivienda, en la educación, y así los llamados de la población conducen a la extinción de la junta de higiene, y el gobierno expide la ley 32, para que en cambio de la junta de higiene surja la Dirección Nacional de Higiene que comenzó a funcionar en 1919, y la ley 46 expidió la construcción de casas realmente dignas y habitables en condiciones de higiene para las clases trabajadoras, se ampliaron las instalaciones del Hospital San Juan de Dios, que fue el primer hospital de Bogotá, y que prestaba servicios básicos desde el año1564 en un predio cercano a la catedral primada, así en 1919 se adquiere por parte del gobierno un predio que era un molino, llamado el Molino de la Hortua de 12 hectáreas donde realmente podía funcionar como hospital y la Dirección Nacional de Higiene creo droguerías municipales para atender a las personas de bajos recursos y habilito un servicio domiciliario de atención.




Entonces, para 1920 muchas reformas en cuanto a servicios de salud y vivienda ya se hacían realidad, no solo de la mano del gobierno sino de los empresarios que gestionaron y asumieron económicamente proyectos de desarrollo de vivienda, ejemplo de ello es el Barrio La Perseverancia que surgió en esa época como El Barrio de la Unión Obrera, desarrollado por la fabrica de Cerveza Bavaria y la comunidad, que como paradoja su historia siempre estuvo marcada por la dificultad, pues la gente que formo comunidad en este sector fueron campesinos desplazados por la guerra de los mil días, y vieron en la capital la oportunidad de fuente de empleo en las diferentes fabricas existentes, como la ya mencionada de cerveza, la fabrica de chocolates, la fabrica de loza, la fabrica de cemento y así se formaron en Bogotá hacia el oriente de la ciudad zonas donde estos campesinos habitaban sin ninguna garantía de salud o aseo conocido como El Paseo Bolívar y donde por falta de higiene y hacinamiento prolifero la gripa española, como sucede ahora en época del coronavirus que muchas personas han migrado no solo a Bogotá sino a diferentes lugares de Colombia acomodándose como pueden (que en este punto del escrito se me ha erizado la piel, porque son muchas las situaciones en común entre 1918 y el 2020) en zonas donde ya no cabe mas gente y no en las mejores circunstancias con cero planeación.








Y así surgieron soluciones viables para la problemática de la epidemia y otras cositas que salieron a flote, se higienizo la ciudad, como paso con el coronavirus, y no falto el empresario que apoyo a sus empleados para que adquirieran vivienda como el señor Leo Kopp, Fundador de Bavaria, quien ofreció subsidios, prestamos y ayudas para que sus obreros pudieran adquirir vivienda digna dentro de los proyectos de construcción, este empresario Alemán hizo tanto por las personas que aun en su tumba hoy con el coronavirus las personas creyentes le piden ayuda, aunque nada es gratis en esta vida porque las campañas de higienización promovieron el consumo de la cerveza por ser un producto con estándares de asepsia, lo que dejo muy mal paradas a la chicha y el guarapo que eran bebidas artesanales echas en casa de una Doña por la Doña, como pasa hoy día con el coronavirus que las campañas de reactivación de la economía favorecen a unos cuantos menos a la Doña.



Y así a los habitantes del barrio La Perseverancia, les toco perseverar como a muchos Bogotanos y Colombianos nos toca perseverar, ahora si no sabes donde queda ubicado el barrio basta con que observes el Cerro de Monserrate, bajes la mirada y justo allí en la zona centro oriental de Bogotá, a espaldas del Museo Nacional y la zona del rio Arzobispo esta el barrio.





Entonces, después de esta narración a la pregunta ¿La nueva realidad realmente existe?, pues la respuesta es No, no existe una nueva realidad, existe la realidad transformada por los hechos y acontecimientos que se desencadenan en un territorio, existe la realidad sujeta a cambios y adaptaciones, problemáticas y soluciones, esperar en 2021 que todo vuelva a ser como antes del coronavirus, es como esperar a que todo vuelva a ser como antes de 1918, 

Hasta la próxima reflexión ...


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